KIEV, Ucrania (AP) — La decisión del presidente estadounidense Joe Biden de poner fin a su campaña de reelección aporta un nuevo elemento de incertidumbre para Ucrania, que lucha por defenderse de los avances militares rusos al tiempo que se preocupa por el futuro del apoyo estadounidense.
La perspectiva de una victoria del expresidente Donald Trump, el candidato republicano, preocupa desde hace tiempo a Kiev, que teme que le reste apoyo y obligue a Ucrania a pedir la paz en condiciones que favorezcan a Rusia. El Kremlin lanzó su invasión a gran escala a principios de 2022, lo que dio lugar a más de dos años de guerra.
Pero aunque los demócratas esperan que la decisión de Biden de retirarse y apoyar a la vicepresidenta Kamala Harris inyecte energía a su campaña, no está claro si eso aumenta las probabilidades de que Trump sea derrotado. Los funcionarios en Moscú, que en general se cree que favorecen a Trump, no se comprometieron.
Yulia Loginova, residente de Kiev, dijo que le resultaba imposible predecir cómo afectaría a Ucrania la salida de Biden.
“No lo sé, la verdad”, dijo. “Todos los días me sorprende, pero hizo lo correcto”.
Phillips O’Brien, profesor de estudios estratégicos en la Universidad de St. Andrews en Escocia, dijo que la retirada de Biden “cambia la narrativa de la campaña”, pero es demasiado pronto para decir cuánto alterará la dinámica de las elecciones presidenciales.
“Si eso aumenta las posibilidades de que los demócratas ganen, Ucrania estará contenta”, afirmó. “No creo que una administración de Harris sea tan diferente de una administración de Biden”.
Ucrania puede estar atravesando momentos difíciles, independientemente de quién gane. Si bien Estados Unidos es el principal aliado de Ucrania, bajo el gobierno de Biden a veces se lo ha visto como un amigo frustrante.
De pie en la Plaza de la Independencia de Kiev, junto a un mar de pequeñas banderas ucranianas dejadas en homenaje a los caídos en la guerra, un soldado dijo que la victoria «es imposible sin el apoyo de los EE.UU., eso es un hecho. Tienen la mayor cantidad de armas, influencia y todo lo demás».
Aún así, el soldado, que sólo dio su apodo, Sadik, de acuerdo con las reglas militares, dijo que si Estados Unidos hubiera brindado más apoyo, “la guerra habría terminado hace mucho tiempo”.
Pero una nueva administración de Trump empeoraría mucho las cosas, añadió.
«Si Trump gana, habrá pocas o ninguna arma», dijo, añadiendo que temía que Ucrania se viera obligada a hacer concesiones para poner fin a la guerra, donde las tropas del Kremlin están logrando avances graduales en el campo de batalla.
Trump se ha jactado de que podría poner fin al conflicto en 24 horas, y los ucranianos creen que cualquier acuerdo de ese tipo se realizaría en los términos de Rusia.
La elección por parte de Trump del senador de Ohio J.D. Vance, un oponente de la ayuda militar estadounidense a Ucrania, como compañero de fórmula para la vicepresidencia ha provocado más alarma.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, dijo durante una visita a Gran Bretaña la semana pasada que tratar con Trump sería una tarea difícil, pero agregó que los ucranianos no «tienen miedo del trabajo duro». El líder de Ucrania y Trump hablaron por teléfono el viernes, una llamada que ambos hombres describieron como buena en la plataforma de redes sociales X.
Zelensky agradeció a Biden por su “apoyo inquebrantable” y sus “pasos audaces” durante la guerra.
«La situación actual en Ucrania y en toda Europa no es menos desafiante, y esperamos sinceramente que el continuo y fuerte liderazgo de Estados Unidos evite que el mal ruso triunfe o que su agresión dé sus frutos», escribió Zelenskyy en X.
Sin embargo, la gratitud de Ucrania por el apoyo estadounidense está teñida de frustración por sus limitaciones.
A medida que Rusia ha intensificado los ataques contra las ciudades y la infraestructura de Ucrania, el gobierno de Zelenskyy ha presionado para que la administración Biden autorice el uso de armas suministradas por Estados Unidos para atacar el interior de Rusia. Ucrania quiere atacar los sitios, a menudo alejados de la frontera, que Moscú utiliza para lanzar ataques aéreos contra Ucrania. Washington no ha dado permiso por temor a que el conflicto pueda escalar.
«Los ucranianos están bastante decepcionados con Biden», dijo Edward Lucas, asesor principal del Centro de Análisis de Políticas Europeas. «La vacilación de Biden tiene un precio, que se paga en la destrucción de la infraestructura ucraniana y la masacre de civiles ucranianos, y en bajas innecesarias en el campo de batalla.
“Así que, aunque Trump podría ser peor… una continuación de la línea de Biden ya es bastante sombría”.
Varios demócratas estadounidenses de alto rango se han apresurado a apoyar a Harris como candidata. En materia de política exterior, sus declaraciones públicas han coincidido, como era de esperar, con las de Biden. En febrero, durante la Conferencia de Seguridad de Múnich, dijo que “el presidente Joe Biden y yo estamos con Ucrania” y prometió que la administración “trabajaría para asegurar las armas y los recursos críticos que Ucrania necesita con tanta urgencia”.
Heather Hurlburt, ex funcionaria de la administración Biden que ahora trabaja en el grupo de expertos Chatham House, dijo que Harris había estado “muy al frente y al centro de la política sobre Ucrania” y que probablemente mantendría el mismo rumbo que Biden.
Mientras tanto, en Moscú, los funcionarios sugirieron que la salida de Biden no los disuadiría de sus objetivos en la guerra y no ofrecieron ninguna opinión sobre si haría una diferencia en las gélidas relaciones entre Rusia y Estados Unidos, aunque Trump y el presidente Vladimir Putin han intercambiado elogios a lo largo de los años.
«No nos corresponde a nosotros evaluar las decisiones del presidente de Estados Unidos», declaró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. «Es algo que debería preocupar a los votantes estadounidenses».
Dmitry Medvedev, subdirector del Consejo de Seguridad de Rusia, dijo en la aplicación de mensajería Telegram que la salida de Biden no cambiaría la estrategia de Rusia en Ucrania.
«Los objetivos de la operación militar especial se lograrán», añadió, utilizando el término que utiliza el Kremlin para definir la guerra.
Ucrania y otros aliados de Estados Unidos también temen que Estados Unidos se vuelva menos confiable, independientemente de quién gane. Con un electorado y un Congreso divididos, el próximo presidente podría fácilmente verse absorbido por los desafíos internos antes de siquiera tener que lidiar con múltiples puntos conflictivos en todo el mundo. El estancamiento en el Congreso que paralizó durante meses un paquete de ayuda militar de 61.000 millones de dólares a Ucrania antes de que finalmente fuera aprobado puso de manifiesto la precariedad de la situación.
En Kiev, los ucranianos absorbieron el último giro de una elección estadounidense que puede determinar el futuro de su país.
“Amo a Biden porque apoyó a Ucrania”, dijo Mykyta Kolesnikov, quien administra un negocio de lavado de autos. “Nos envió ayuda importante para la guerra cuando la necesitábamos”.
Pero Kolesnikov, de 21 años, dijo que entendía que Biden tenía que dar un paso al costado y solo esperaba que los demócratas presentaran un candidato más fuerte.
“Zelensky dice que puede trabajar con Trump, pero será muy difícil para Ucrania trabajar con Trump y su equipo”, dijo Kolesnikov.
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Lawless informó desde Londres. Los periodistas de Associated Press Vasilisa Stepanenko y Samya Kullab en Kiev contribuyeron a este artículo.