LONDRES (AP) — La primera mujer negra parlamentaria del Reino Unido podrá presentarse como candidata por el Partido Laborista en las próximas elecciones generales, dijo el viernes el líder Keir Starmer después de unos días conflictivos sobre su futuro político.
Starmer dijo a los periodistas durante un viaje de campaña a Escocia que Diane Abbott, que ha sido legisladora laborista desde 1987, es “libre” de presentarse como candidata laborista en las elecciones del 4 de julio.
«Ella ha abierto un camino para que otras personas entren en la política y la vida pública», dijo.
Su futuro en el partido ha estado en duda durante el año pasado, particularmente tras el anuncio de las elecciones la semana pasada por parte del Primer Ministro conservador Rishi Sunak.
En el momento de ese anuncio, Abbott, de 70 años, estaba en el limbo mientras cumplía una suspensión por comentarios el año pasado que sugerían que los judíos e irlandeses no experimentan racismo “toda su vida”.
Aunque se disculpó inmediatamente por esos comentarios, la maquinaria del partido sólo reintegró a Abbott a principios de esta semana, pero no había tomado una decisión sobre si ella sería la candidata por su circunscripción en el noreste de Londres. La disputa cobró fuerza después de que Abbott dijera que había escuchado que se le prohibiría postularse para el partido en las elecciones generales.
Abbott aún tiene que responder a la declaración de Starmer.
En los últimos días, el intento de Starmer de transmitir el mensaje de su partido sobre una variedad de temas, incluidas la economía y la salud, se ha visto ensombrecido por las preguntas sobre Abbott.
Aunque constantemente elogió a Abbott como una “pionera”, Starmer no respondió a las preguntas sobre si sería candidata.
Eso alimentó las acusaciones de que estaba purgando a los elementos más izquierdistas de su partido, especialmente aquellos con una estrecha conexión con el exlíder Jeremy Corbyn, quien ha sido expulsado del Partido Laborista y se presenta como candidato independiente en su circunscripción en el norte de Londres. Abbott y Corbyn son aliados desde hace mucho tiempo.
Un portavoz del Partido Conservador dijo que la disputa demostraba que Starmer es un «líder débil que está perdiendo el control del Partido Laborista».
Más de una semana después de iniciada la campaña, el Partido Laborista mantiene una gran ventaja en las encuestas de opinión que, de llevarse a las elecciones, le llevarían a convertirse en gobierno después de 14 años en la oposición.
