Según un informe del medio japonés Yomiuri Shimbun, tras analizar los ejercicios militares del año pasado realizados por el Ejército Popular de Liberación (EPL), el gobierno japonés concluyó que el EPL tiene la capacidad de desplegar fuerzas terrestres para desembarcar en Taiwán en tan solo una semana. Esta nueva evaluación acorta significativamente la estimación anterior del gobierno japonés, que sugería que tardaría aproximadamente un mes.
El informe detalla que el análisis del gobierno japonés se centró en los lanzamientos de misiles y ejercicios navales del EPL realizados en el país y en los mares cercanos el verano pasado. Un alto funcionario del gobierno japonés reveló a los medios de comunicación que, tras una serie de ejercicios integrales, si varias unidades del EPL participaran en operaciones simultáneas, el EPL podría bloquear los mares y el espacio aéreo circundantes de Taiwán en cuestión de días y facilitar un desembarco a gran escala de fuerzas terrestres.
El informe afirma que el primer ministro japonés, Fumio Kishida, ya habría sido informado de los resultados de estos análisis este año.
El informe de los medios de comunicación japoneses revela que el gobierno japonés prevé que el orden de operaciones del EPL para un ataque militar a Taiwán incluya bloqueos navales, ataques con misiles contra instalaciones militares taiwanesas, despliegue de tropas utilizando buques de desembarco y helicópteros de transporte para establecer cabezas de playa, y el transporte de tropas y tanques utilizando buques de desembarco y grandes buques de carga civiles.
El informe también sugiere que el EPL prevé posibles contraataques de Taiwán y la intervención del ejército estadounidense, lo que podría obstaculizar sus operaciones. Por lo tanto, el EPL podría considerar la posibilidad de reprimir a Taiwán antes de que las principales fuerzas estadounidenses puedan intervenir. Además, Beijing podría lanzar una “guerra híbrida” contra Taiwán, combinando ataques militares con ataques cibernéticos a infraestructura crítica para retrasar la intervención estadounidense.
En cuanto a la duración del conflicto y la evacuación de los ciudadanos extranjeros, el informe cita el análisis del gobierno japonés, que destaca que si el EPL adoptara operaciones de ultracorto plazo antes de que las fuerzas estadounidenses pudieran reaccionar, la capacidad de países como Japón y Estados Unidos para responder rápidamente se convertiría en un punto central. Por ejemplo, Japón tendría que considerar cómo proteger a aproximadamente 20.000 ciudadanos japoneses en Taiwán y evacuar a los residentes de las islas Sakishima de la prefectura de Okinawa, cerca de Taiwán.
En cuanto a la respuesta de las Fuerzas de Autodefensa de Japón, según la Ley de Seguridad de 2015, el gobierno japonés debe evaluar si la situación cumple los criterios para proporcionar apoyo de retaguardia a los buques estadounidenses en una “situación que tenga una influencia importante” o ejercer una autodefensa colectiva limitada en una “situación de crisis existencial”. Si las Fuerzas de Autodefensa de Japón se movilizaran en respuesta a estas situaciones, generalmente se requiere la aprobación parlamentaria por adelantado. El informe señala que para que Japón responda a operaciones de ultracorto plazo, sería crucial que el gobierno japonés tomara una decisión rápida.