El 20 de julio, el South China Morning Post informó que los científicos de la Academia Naval de Submarinos de China están realizando un estudio que sugiere que los submarinos podrían tener la tarea de destruir satélites en el momento y lugar adecuados si la seguridad nacional se ve amenazada. Esto incluye la posible destrucción de satélites camuflados en satélites civiles, como los satélites Starlink, cada vez más militarizados.
Informe: los satélites Starlink representan una amenaza importante; las armas láser podrían derribarlos
Según el South China Morning Post, el profesor Wang Dan, de la Academia Naval de Submarinos de China, está involucrado en esta investigación. Un artículo publicado en junio en la revista Command, Control, and Simulation revela que China está investigando activamente armas láser antisatélite. Un submarino equipado con armas láser de estado sólido de clase megavatio puede extender un “mástil óptico” retráctil para disparar a un satélite mientras permanece sumergido, y luego retirarse a aguas profundas, destruyendo el satélite enemigo sin dejar ninguna evidencia.
La investigación se basa en dos razones principales: las armas antisatélite actuales son demasiado caras para su uso frecuente y la gran cantidad de constelaciones de comunicaciones por Internet en órbita terrestre baja plantea una amenaza cada vez mayor. Neutralizarlas cuando sea necesario está en línea con los intereses de seguridad nacional.
Métodos antisatélites establecidos y su costo
En la actualidad, el método antisatélite más maduro es el misil antisatélite de ascenso directo. Estos misiles, lanzados desde tierra o mar, aceleran mediante motores de cohetes, se cruzan con la trayectoria del satélite y destruyen el objetivo en caso de colisión. China, Estados Unidos y Rusia han realizado lanzamientos de prueba de misiles antisatélite. Las fechas clave son las siguientes:
– 11 de enero de 2007: China utilizó un cohete Kaituozhe-1 con una ojiva cinética para destruir el extinto satélite meteorológico Fengyun-1C a una altitud de 865 km.
– 20 de febrero de 2008: El USS Lake Erie (CG-70) de la Armada estadounidense disparó un misil SM-3 para destruir el incontrolable satélite USA-193 en un apogeo de 365 km y un perigeo de 349 km.
– 15 de noviembre de 2021: El sistema de misiles A-235 de Rusia realizó un lanzamiento de prueba y destruyó el extinto satélite Cosmos-1408 a una altitud de 645 km.
El costo de estos misiles se puede calcular. La mayoría de los satélites de comunicaciones en órbita baja terrestre se encuentran a menos de 1.200 km, lo que hace que 1.200 km sea un alcance típico para un misil antisatélite, equivalente a un alcance de 2.400 km sobre un objetivo terrestre, lo que lo clasifica como un misil balístico de alcance medio.
El mayor costo de los misiles antisatélites reside en la ojiva, especialmente el vehículo de destrucción cinética, que es sumamente preciso y cuesta decenas de millones de dólares. Por ejemplo, el misil estadounidense SM-3 Block 1/1A cuesta 55 millones de dólares cada uno. Incluso si China pudiera producir misiles al 10% de ese costo, seguiría costando 5 millones de dólares por misil. Con más de 6.000 satélites Starlink en órbita, destruirlos podría llevar a la bancarrota a un adversario antes de que se produzcan daños significativos.
El uso militar en expansión de Starlink
Starlink, inicialmente pensado para comunicaciones civiles, ahora se utiliza ampliamente en el ámbito militar, en particular en la guerra entre Rusia y Ucrania para comunicaciones de primera línea, control de drones, coordinación de defensa aérea y enlaces de datos para ataques terrestres. A pesar del deseo de Rusia de destruir Starlink, la influencia geopolítica de Estados Unidos le disuade de actuar.
Starlink Gen 2 puede conectarse directamente a teléfonos, y el servicio Starshield de SpaceX ofrece gestión de satélites, lanzamientos de satélites de reconocimiento y procesamiento de datos para el ejército estadounidense. En vista de estos avances, el South China Morning Post cree que el desarrollo de armas láser submarinas por parte de China está principalmente dirigido a Starlink.
Estrategia de ataque furtivo
El South China Morning Post informa que esta arma láser podría instalarse en submarinos. Un arma láser de fibra de clase megavatio se extendería desde un mástil óptico, atacaría al satélite, luego se retraería y se sumergiría para evadir la detección. Al atacar un satélite fuera del territorio chino, como sobre el océano Pacífico, Atlántico o Índico, sería difícil atribuir el ataque a China.
Esta estrategia aprovecha el sigilo del submarino, que solo sale a la superficie para una breve emboscada antes de sumergirse en otro lugar. El uso de bandas atmosféricas invisibles a simple vista no dejaría evidencia, lo que hace que la operación sea casi perfecta.
Ventajas y practicidad de las armas láser
Si bien las armas láser son costosas de desarrollar, su costo operativo es bajo, lo que las hace adecuadas para la destrucción de satélites a gran escala, a diferencia de los misiles antisatélites, que están limitados por altos costos y restricciones prácticas.
Principios y capacidades de las armas láser
Los láseres, generados por emisión estimulada de radiación, permiten concentrar la energía de forma muy concentrada. Esta característica hace que los láseres sean ideales para uso militar debido a su velocidad, precisión y dificultad para interceptarlos.
Las armas láser, en particular los láseres de estado sólido y de fibra, se han vuelto más prácticas gracias a los avances en miniaturización y eficiencia energética. Sin embargo, la necesidad de mantener el foco en un objetivo durante un tiempo plantea desafíos, especialmente contra objetos que se mueven rápidamente. La absorción atmosférica complica aún más la localización de los satélites.
Posibles aplicaciones de las armas láser submarinas
La investigación sugiere que estas armas podrían ser eficaces contra los sistemas ópticos de los aviones antisubmarinos y los enjambres de drones. Si bien están pensadas principalmente para misiones antisubmarinas y de apoyo estratégico, sus capacidades antisatélites son una característica notable, aunque discreta.
En conclusión, el desarrollo de armas láser basadas en submarinos refleja la intención estratégica de China de contrarrestar amenazas como Starlink, mejorando sus capacidades de sigilo y ofensivas y manteniendo al mismo tiempo una negación plausible.