Un ataque aéreo ruso contra la aldea de Matveyevka, en la región de Zaporozhye, destruyó con éxito un almacén de municiones para el sistema de misiles y artillería de cohetes HIMARS. Según se informa, el almacén contenía tanto artillería de cohetes como misiles balísticos de corto alcance ATACMS, que pueden ser lanzados por el sistema. Se dice que un gran convoy de ambulancias se dirigió hacia la zona afectada después de la explosión. Poco después se informó del ataque a otro arsenal de municiones y equipo militar en el cercano asentamiento de Kamennoye. Ambos ataques fueron reportados por primera vez el 29 de junio.
Las fuerzas ucranianas han tenido cada vez más dificultades para utilizar medios guiados de precisión contra las posiciones de primera línea rusas debido al uso eficaz de la guerra electrónica para bloquear sus sistemas de guía, lo que parece haber aumentado su propensión a utilizar sistemas como ATACMS para ataques contra objetivos estratégicos fijos más alejados de las líneas rusas, que carecen de una protección comparable a la de las fuerzas de primera línea. Un ejemplo notable fue un ataque con misiles ATACMS contra el sitio de comunicaciones del espacio profundo NIP-16 en Vitino, en la península de Crimea, en la última semana de junio, y un ataque contra una playa de Crimea poco después que causó importantes bajas civiles. El uso de estos sistemas se ha visto muy facilitado por la presencia de asesores militares estadounidenses sobre el terreno y por el acceso a una red de cientos de satélites de la OTAN que proporcionan datos sobre objetivos, entre otras funciones.